Llevo tiempo queriendo este tarro, desde que lo vi en uno de los libros "Tilda". Tiene doble función, por un lado, sirve para guardar lo que se quiera (botones, hilos, herramientas de la costura...) y por otro, un alfiletero en la parte superior de la tapa. Además, queda bastante bien como elemento decorativo comparado con otras cajas o utensilios.
Hacerlo, no fue del todo fácil. Para hacer este tipo de tarro lo ideal es tener la tapa de un frasco Mason Jar ya que son especiales para envasar al vacío y traen una tapa en la que se puede quitar el centro. El problema está, que en España es súper difícil encontrarlos. Yo fui incapaz. Así que, en este caso, a la tapa, tuvimos que hacerle un agujero en el centro y por si fuera poco, pintarla para darle un aire cromado ya que era dorada con alguna que otra letra para que el resultado fuera lo más semejante posible a lo que quería. Para el alfiletro, un lino blanco con corazones grises que encaja a la perfección con el cromado de la tapa. El resultado de todo este trabajo me encanta.
Para terminar, me despido con uno de mis encargos listo para ser entregado.
Un abrazo
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